Sí, ya lo sé. Creéis que os quiero cebar a todas. Pero, ¿y el placer que da comer estos muffins de plátano y chocolate? Jejeje...
La receta original la saqué de la web de Joy of Baking (La Alegría de Hornear), en donde tienen un listado muy amplio de repostería. La he descubierto hace bastante poco y aún me queda mucho por explorar, pero ya tengo un par de recetas a las que les he echado el ojo.La receta dice que salen unos 24 muffins, aunque a mí me salieron más (creo que 26 ó 28), y he de reconocer que quedan mucho mejor en moldes de papel que en los de silicona, aparte que te da menos pereza darlos y luego tener que estar esperando a que te devuelvan los moldes.
Pues nada, vamos al lío...
Ingredientes:
- 400g de azúcar blanco
- 245g de harina
- 75g de cacao en polvo
- 1 cta y 1/2 de levadura en polvo
- 1 cta y 1/2 de gasificante
- 2 plátanos maduros
- 240 ml de agua tibia
- 120 ml de leche
- 120 ml de aceite vegetal
- 1 cta y 1/2 de extracto de vainilla
* La receta original es para hacerla con un frosting (como un glaseado) de ganache de chocolate, pero las muffins estaban tan buenas tal cual, que al final decidí no hacerlo. Por eso en la foto salen ingredientes que no están en la lista, así que ignorad la mantequilla, la nata y el chocolate fondant (¡¡¡que eso engorda mucho!!!)
Procedimiento:
En un bol grande mezclaremos el harina, el cacao, el azúcar, la levadura, el gasificante y la sal (o sea, todos los ingredientes secos) y los mezclaremos con las varillas para que le entre aire y así quede una mezcla esponjosa.
En un bol aparte mezclaremos los huevos batidos con el plátano triturado (con machacarlo con un tenedor es suficiente), el agua, la leche, el aceite y el extracto de vainilla.
Añadiremos la mezcla de líquidos a la de secos, y batiremos hasta que quede todo bien integrado. Os quedara una masa tirando a líquida y con un montón de burbujitas, que es lo que hará que las muffins salgan súper esponjositas.
Llenaremos los moldes hasta 3/4 con la mezcla y los meteremos al horno, que habremos precalentado al máximo, y hornearemos a 180º durante 20 minutos aproximadamente. A mí me salieron 2 horneadas, y entre una y otra volví a subir la temperatura al máximo para no alargar el tiempo de la segunda.
Primera horneada:
Segunda horneada esperando su turno:
Nota importante: Tonta de mí, pensaba que lo de poner los moldes de papel dentro de los de silicona era una chorrada que se hacía para quedar de profesional. Pues no. Resulta que si pones la masa dentro de un molde de papel, éste se abre cual flor en primavera hasta que se acaba saliendo todo dejando la cocina perdida. Qué bonita es la experiencia y cuánto se aprende de ella...
Cuando saquéis los muffins del horno, mucho cuidado porque queman (un montón) y están muy sensibles. Se deformarán con sólo mirarlos, así que déjalos enfriar un rato en un lugar fresco y, una vez templados, los podremos colocar en una rejilla o en un plato para que terminen de enfriarse. ¡Y ya están!
La textura es súper esponjosa y súper suave, y es muy complicado comer sólo uno (según te acabas el primero, ya estás acechando al siguiente jejeje). La combinación de plátano y chocolate está buenísima así que, si tenéis plátanos maduros a punto de estropearse, no lo dudéis y probad esta receta (así no quedaré yo sola de gordi).
Jolin que rico! Un placer dulce de vez en cunado no hace daño a nadie, no?
ResponderEliminarMe llevo un par, guapetona! Que os aprovechen en casa!
BBbbbbbbrrrrrr! con el hambre que tengo...
ResponderEliminarMagníficos!
Yo creo que esto es lo peor que he podido cocina, porque los casi 30 muffins que salieron desaparecieron ¡¡¡en menos de 3 días!!! Vale que tuve visita en casa, pero es que son un vicio. Yo sólo pensaba: "Por dios, que se acaben ya para no seguir comiendo" jajajaja
ResponderEliminarPrometo que para la próxima vez haré, por lo menos, dos recetas sanitas.
Un besito a las dos!!!
Tú tranquila, que nos invitas a merendar y ya verás como desaparecn rápido.
ResponderEliminarQue pinta más rica, por dios!