Jabón de Leche de Burra (Review)

Hace 1 año y medio, descubrí casi por casualidad este jabón artesanal dedicado a la higiene facial.

De la nada, había empezado a salirme un montón de granos, sobre todo por la zona de las mejillas y la mandíbula. Se notaba que eran granos "hormonales" porque no eran simples granitos de esos que salen en la superficie de la piel, sino como quistes  que aparecían en las capas más profundas de la cara y que, poco a poco, iban saliendo a la superficie. Eran bastante dolorosos al tocarlos y, usara el producto que usara, no había manera de que desaparecieran o disminuyeran. 

Probé todos los productos habidos y por haber: diferentes limpiadores faciales (Cetaphil, Sebamed...), muchas cremas hidratantes, cremas para los granos (que me los secaba, pero no evitaba que me salieran más). Pregunté en farmacias y en el dermatólogo, y la única solución que me dieron fue el Roacután, un tratamiento para el acné (muy agresivo y muy caro) por el que ya pasé a los 16 años y por el que no quería volver a pasar.

Se acercaba el verano y yo ya estaba pensando en la playa y el mar y en lo bien que me iba a sentar el yodo y el salitre para mi malograda cara. Ese año nos fuimos con unos amigos a Fuerteventura a pasar unos días.  Estando ahí, le comente a mi amiga Cristina lo mal que lo estaba pasando y las ganas que tenía de que los malditos granos se fueran a tomar viento fresco, cuando ella me dijo: "¿Y por qué no usas jabón de leche de burra?". Por un momento pensé que me estaba vacilando, pero no. 

Mi amiga Cristina nunca había sido de granos, pero durante su embarazo tuvo un desparrame hormonal y le empezaron a salir granos como los míos pero en toda la zona de la mandíbula (donde, al estar más cerca del hueso, duelen un montón). Su ginecólogo, un médico a favor de los productos naturales, le recomendó este jabón y, como por arte de magia, los granos le desaparecieron.

Como os imaginaréis, según terminó de contarme esto, ya estábamos camino de la tienda para comprar ese jabón tan maravilloso. Tengo que decir que era bastante escéptica con los resultados, pero aún así me agencié el jabón de limón y avena de la marca Ruc & Company.

A continuación os dejo algo de información sobre estos jabones de leche de burra:

Ruc & Company son productores de leche de burra desde 1994. Tienen una granja situada a 500 metros de altitud en el corazón del Pirineo. En la granja hay burras de varias razas, seleccionadas por su buen carácter y la calidad excepcional de su leche debida a los prados que les rodean.

La burra, al contrario de la vaca, se tiene que ordeñar muy a menudo por la poca cantidad de leche que produce. En periodo de lactación, puede producir de 5 a 8 litros de leche. El burrito debe quedarse al lado de su madre para que se deje ordeñar.

En los analisis bioquímicas de la leche de burra, se ve que es muy rica en ácidos grasos, vitaminas A, E y F. Por su composición es recomendable para las pieles secas, las arrugas y las pieles sensibles. Tiene un efecto tensor y rejuvenecedor en las células, previene el envejecimiento y regenera la piel.

En la literatura y en el cine siempre se ha hablado de los baños en leche de burra de Cleopatra, que quería conservar la belleza y elasticidad de su piel. Para preparale un baño se necesitaban nada menos que 300 burras.

La explotación de la burra lechera era un honor en la antiguedad. Los griegos la tomaban como medicina y los romanos la consideraban una bebida de lujo. Hipocrates la recomendaba a sus pacientes en caso de envenenamiento, cicatrices y dolores articulares, entre otros.

En los siglos 19 y 20, la leche de burra era una medicina muy conocida. En París, las bellas damas acudían a establecimientos especilizados para obtener un poco de esta bebida tan lujosa. Cuando se acabo la moda, los establecimientos se trasformaron en "hospitales" de niños  (huerfanos ...) que necesitaban leche. Los bebes se alimentaban directamente de la burra. Pesando a los bebes vieron que  tomaban entre 1 litro y litro y medio al día.

El doctor Parrot que se encargaba del "hospital des enfants assistés" lo relata en el "bulletin oficiel de médecine en 1882" : "Las cuadras donde estaban las burras, sanas, bien ventiladas y limpias se comunican con el dormitoriode los niños : Tratada con dulzura, la burra deja  que se alimente el niño. Su anatomía se adapta bien a la boca del niño pequeño. La enfermera se sienta al lado de la burra y le presenta el niño, de vez en cuando, presiona un poco para ayudar la salida de la leche. Los niños maman 5 veces al día y 2 veces durante la noche. Una burra puede alimentar 3 niños de 5 meses."

La leche de burra es excelente para todo tipos de piel, su retinol natural lo repara todo. Piel seca, piel grasa, acne, drematitis... En nuestra gama ustedes encontraran también : la crema facial de lache de burra : protege, nutre, regenera la piel, tiene un efecto tensor.
La mascarilla facial : excepcional... con 50% de leche  de burra fresca, efecto tensor y frescura a la piel inmediato. La crema de cuerpo : hidrata, reafirme, deja la piel suave.....

Fuente: http://www.institutoeuropeodelbienestar.com/lechedeburra/index.htm

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Ruc & Company ofrece una gran variedad de jabones, cada uno de ellos con una  propiedades diferentes, según el tipo de piel: eucalipto, menta, canela, lavanda, pachulí, naranja, avena y verbena. La página web no especifica el uso específico para cada uno así que lo único que puedo deciros es que el de avena está indicado para pieles con problemas de acné.

Ahora, mi opinión personal del Jabón de Leche de Burra de Avena y Limón:

Se trata de un jabón de un tamaño ligeramente superior a las típicas pastillas de jabón que solemos encontrar en las tiendas. Tiene un olor suave y agradable y al tacto podemos notar pequeños trocitos de avena incrustados en la pastilla. 

Al mezclarlo con agua, con solo frotarlo un poco, produce una gran cantidad de espuma consistente y cremosa que se reparte con facilidad por la cara. Tras el aclarado, la sensación que te queda es de tener la piel limpia, fresca e hidratada (no tanto como para prescindir de la crema hidratante, pero sí sin esa sensación de sequedad y tirantez que te dejan otros jabones más fuertes).

La pastilla tiene una duración de entre 6 y 9 meses (dependiendo de la asiduidad con que la utilices) y su precio es de 4,50€.  Tienes la opción de pedirlo on line en su web, pero yo antes les mandaría un correo preguntando si existe algún distribuidor cerca de donde vives (y así ahorrarte los gastos de envío). Yo tengo la mala suerte de no tener ningún distribuidor en Gran Canaria.

Llevo usándolo desde entonces y, la verdad, es que se ha convertido en uno de mis imprescindibles. Los granos han desaparecido, tengo la piel más suave y sin zonas secas (como, por ejemplo, la zona alrededor de la nariz). Ahora mismo estoy apunto de acabar mi segunda pastilla de jabón y estoy dudando entre hacer un pedido de varios jabones o esperar un poco, ya que hace poco que mi cuñada me ha regalado un jabón de barro del mar muerto y no sé si empezar con ese para ver qué tal me va.

Y creo que eso es todo. ¿Qué os ha parecido? ¿Conocíais estos jabones?

Un saludo!!!